Cuando el cuerpo activa sus defensas contra los gérmenes sube la temperatura corporal, por tanto, la fiebre no es enemiga, sino nuestro aliada, y lo importante no es reducirla, sino averiguar por qué se produce, según el sitio guiainfantil.com
Para determinar cuál es la causa que produce la fiebre es imprescindible observar los síntomas que presenta el niño. Generalmente, la fiebre aparece en los niños por dolencias leves como infecciones de las vías respiratorias (resfriados, gripe, faringitis), del aparato digestivo (gastroenteritis, deshidratación).